11 de noviembre de 2010

EL GUIÓN DE VIDA-I (BASADO EN EL LIBRO "LOS GUIONES QUE VIVIMOS" DE CLAUDE STEINER)

Por  Sarah Cid


  INTRODUCCIÓN: Claude Steiner es un importantísimo autor en el Análisis Transaccional (creado por Eric Berne), al cual ha hecho nuevas e importantes aportaciones.
"Los guiones que vivimos" se publica por 1ª vez en 1974 y es un clásico de la bibliografía transaccional. En él sostiene que todos representamos un "guión" que adoptamos en nuestra infancia. Este guión puede llevarnos a la depresión, la infelicidad o, simplemente, a la sensación de impotencia sobre nuestra vida.
  
 A lo largo de nuestra vida muchas veces nos preguntamos acerca de nuestras relaciones amorosas y no acertamos a explicarnos por qué se repiten esquemas que, "aparentemente", no deseamos.



     ¿Por qué todos los hombres que me gustan tienen pareja? o ¿por qué los hombres tratan de dominarme o utilizarme?.
     ¿Por qué todas las mujeres que me interesan quieren casarse? o ¿por qué las mujeres son tan dependientes y manipuladoras?.
     Ni todas las mujeres son de tal forma ni todos los hombres de tal otra. En ambos sexos hay personas con más o menos madurez, dependencia, ternura, agresividad, valentía...Las hay con o sin pareja, con distintas ideologías y formas de entender las relaciones afectivas y también hay todo tipo de relaciones: aburridas o vivas, interesadas o entregadas, por amor o por dependencia, sinceras o basadas en la mentira y la deslealtad, etc.
     Siendo esto así, ¿por qué siento atracción por individuos con determinadas características físicas, de personalidad y circunstancias personales que parecen repetirse en mi vida?, ¿por qué me "encuentro " con esas personas y no con otras?.
     Aparentemente todo es casual pero, en realidad, no lo es. Existe una especie de atracción hacia personas y situaciones que nos permiten desempeñar papeles, reproducir creencias y, en fin, mantener un guión de vida.
     Se considera un "guión de vida" un plan basado sobre decisiones tomadas en cualquier estadio del desarrollo, que inhiben la espontaneidad y flexibilidad en la resolución de problemas y de las relaciones humanas.
     Puede que con los años hayamos rechazado y olvidado el "drama familiar" sobre el que se apoya nuestro guión pero, continuamos repitiéndolo inconscientemente en nuestra vida cotidiana.

     En los primeros años adquirimos lo que será la base de nuestra personalidad.
     Durante el proceso de socialización aprendemos a desarrollar unos valores y roles y fantaseamos con que, gracias a ellos, seremos más queridos y tendremos el reconocimiento de las personas amadas. De esta manera se empiezan a estructurar nuestros vínculos afectivos.
     Los primeros vínculos se establecen con las figuras parentales, sobre todo, padre y madre, que son las primeras personas amadas. A través de esas primeras relaciones configuramos los futuros vínculos y, más adelante, desplazamos nuestro impulso amoroso con fantasías de vínculos amorosos hacia otras personas.
     En este proceso niños y niñas imaginan que tienen que ser sumisos, valientes, desconfiados, etc, e incorporan comportamientos como la valentía, dependencia o sumisión, sentimientos como el miedo, la cólera, la tristeza, la alegría, o actitudes como el masoquismo, la confianza o la desconfianza. Y así conseguimos, en nuestra imaginación, ser amados.
     En resumen: sentimos cierta atracción hacia determinadas personas y situaciones porque hemos programado un guión del que no somos conscientes y, a su vez, el encuentro con esas personas o situaciones mantiene, refuerza y confirma nuestro guión.
     A medida que nos damos cuenta de él podemos ver qué identificación hemos hecho y cuáles son los modelos que hemos adoptado; podemos cuestionarnos qué parte de nuestra manera adulta de pensar y actuar es, realmente, un criterio personal bien elaborado o, por el contrario, si reproducimos un programa familiar o social a partir de experiencias y mensajes de la edad temprana.
     Estudiar el guión de vida ayuda a conocer aspectos de nuestra personalidad, entre otras cosas, cómo vivimos los vínculos amorosos, y cuestionarnos  lo que de nuestro guión personal decidimos adoptar para nuestra vida o lo que quisiéramos cambiar porque nos está perjudicando.


Si os interesa conocer a fondo las ideas de  Claude Steiner en este link encontraréis muy  buena información al respecto

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